La Capilla Sixtina y el Cónclave

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Desde las 21:00 horas del 28 de febrero de 2013 la sede de Pedro ha tomado el nombre de Apostolica Sedes Vacans, que mantendrá hasta la elección del próximo Sumo Pontífice. Las preparaciones para el Cónclave, que se tendrán al fondo de la tradicional Capilla Sixtina, ya están en curso. Con la aproximación del Cónclave, la Capilla Sixtina o también llamada “Capilla Magna” del Santo Padre, se convertirá en centro de atención, interna y externamente. En esta maravillosa Capilla, encargada para su realización por el Papa Sixto IV en 1475 y que por tal motivo es nombrada “Sixtina”, los cardenales electores se reunirán para elegir al próximo Papa que será el 266º sucesor de Pedro. Entrando los cardenales en la Capilla Sixtina por la puerta principal, el coro de la misma capilla entonará el Veni Creator Spiritus, de modo que los cardenales, y con ellos toda la Iglesia, puedan implorar el descenso del Espíritu Santo sobre los llamados a la elección del sucesor de Pedro.

Una mirada veloz a la obra maestra que es la Capilla Sixtina nos ayudará a entender los orígenes, los objetivos y la historia del papado. ¿Cuáles son las enseñanzas que las obras de la Capilla Sixtina dan a los purpurados reunidos en la Sixtina para el Cónclave?

Una rápida ojeada a la decoración a los lados de las ventanas de la Capilla Sixtina nos revelan la “Galería de los Papas”. Esta galería nos muestra los primeros 30 papas de la Iglesia que miran hacia abajo, siguiendo con una mirada paterna los eventos que se desarrollan en la Capilla misma. Esta representación de los primeros pontífices nos recuerda que hay una conexión ininterrumpida entre Cristo y Pedro hasta llegar al Papa Benedicto XVI y a su próximo sucesor. La elección del Santo Padre hace referencia a una tradición de 2000 años.

En las paredes de la Capilla Sixtina se encuentran frescos de la vida de Cristo. El famoso fresco de la “Entrega de las Llaves” (1482) por obra de Pedro Perugino adquiere una enorme profundidad sobre todo al fondo del Cónclave, al término del cual, una vez más las “llaves” serán entregadas al sucesor de Pedro.

Pero cómo no dirigir nuestra mirada hacia el magnífico “Juicio Universal” de Miguel Ángel que se encuentra sobre las paredes del Altar. En esta escena, Cristo viene en toda su gloria, rodeado de los ángeles y de los santos para enjuiciar a vivos y muertos. Cristo nos hace una pregunta a cada uno de nosotros: “¿qué has hecho con los bienes que te he dado?”. Hoy, mirando estas imágenes regresan a nuestra mente las palabras del Beato Juan Pablo II delante de este fresco:

“Tú eres Pedro –oyó Simón, hijo de Jonás. A ti entregaré las llaves del Reino”. La estirpe, a la cual ha sido confiada la entrega de las llaves, se reúne aquí, dejándose circundar de la policromía Sixtina, de esta visión de Miguel Ángel que nos ha dejado.

Era así en agosto y después en octubre, del memorable año de los dos cónclaves, y así será ahora, cuando se presentará la exigencia después de mi muerte. Para tales fines se requiere que a ellos hable la visión de Miguel Ángel… Se requiere que, en ocasión del Cónclave, Miguel Ángel enseñe al pueblo: no olviden: omnia nuda et aperta sunt ante oculos eius.
Tú que todo lo penetras, ¡indica!
Él escuchará”.

Triptico Romano Meditación de Juan Pablo II.

Recemos al Señor a fin de que hable a los corazones de los Cardenales y los ilumine al elegir al sucesor de Pedro.